" 101 años de vida de una causa que ha permanecido siempre de pie"
Desde los tiempos màs remotos los asentamientos humanos se basaron en la solidaridad y la convivencia, lo que ocurriò por la necesidad de afrontar difìciles condiciones de vida, algunas veces, y promover el crecimiento de villas y pueblos, muchas otras.
En Barracas al Sud (hoy Avellaneda) sobre todo a principios del siglo pasado, se produjo el mismo fenòmeno con los primeros inmigrantes que canalizaron sus inquietudes de progreso en las
Sociedades de Fomento que a partir de la centenaria "Sociedad de Fomento El Progreso de Villa Barilari" fundada el 20 de diciembre de 1908, las siguieron en esa primera dècada la "Sociedad de Fomento Florentino Ameghino" fundada el 27 de setiembre de 1913, la "Sociedad de Fomento Union Vecinal Domìnico" fundada el 9 de enero de 1916, y la "Sociedad Oficial de Fomento Villa Modelo", fundada el 10 de octubre de 1918, cinco sociedades fundadas en esa primera dècada del fomentismo, que comenzaron una tarea sacrificada y tenàz en favor de los intereses vecinales de esa
Barracas al Sud , que en ese momento crecìa vertiginosamente.
Este crecimiento serìa acompañado por ese movimiento vecinal (que intentando hacer un poco de historia barrial, se dice que sus comienzos fue en el pintoresco Barrio de La Boca, a fines del siglo 19).
Como es sabido, lo mismo que en La Boca, en Barracas al Sud, en sus comienzos fueron una corriente social motorizada de cambio y progreso vecinal, iniciàndose con gestiones para el arreglo de las calles de tierra, zanjeo de las aguas domiciliarias, los primitivos pasos de piedra, los faroles a gas, màs tarde la luz elèctrica, esquinera que paulatinamente se fue extendiendo a los nuevos barrios de la periferia capitalina y de este lado del riachuelo y asì se fue expandiendo por todo el conurbano bonaerense y finalmente por toda la provincia, hasta nuestros dìas, lo que a esta altura eleva cada vez màs, su constructiva misiòn
fomentista, para alcanzar los objetivos de niveles superiores, a los efectos de discutir y estudiar los proyectos municipales. Es importante decir: Asì como los municipios son escuela de Democracia, las Sociedades de Fomento son Escuela de Municipios.
Hemos aprendido que las instituciones de fomento, por vìa pràctica y natural, son los pequeños municipios en cada lugar, sin el poder municipal, pero que tienen por su lucha y contenido social y vecinal, polìtico y cultural, el poder vecinalista y popular.
Otra cosa muy importante, es que las entidades de Fomento durante su vida y lucha, mantengan en algo una clara transparencia, su total independencia de las autoridades municipales de turno y de los partidos polìticos, de este modo, poder presentar proyectos realizables y a la vez elevar cuando sea necesario para reforzar la concreciòn de esos proyectos a los organismos federativos, que agrupa a las Sociedades Fomentistas como la Federaciòn Unica de Sociedades de Fomento de Avellaneda, y en este punto es constructivo señalar que està (la FUSFA), salvo algùn "Malinche" que tuvo sus filas, durante las ùltimas dècadas, tuvo dirigentes que supieron dar ejemplos de madurez polìtica y de urbanizaciòn de grandes emprendimientos e inquietudes, como redes de agua potable, pavimentos, gas natural, cloacas, espacios verdes, arbolado de las calles y la hoy cada vez màs seria cuestiòn de la ecologìa.
Y esa madurez polìtica, quedò demostrado en las dos ùltimas dècadas, en la que frente a nuestra Federaciòn, hubo fomentistas que no permitieron que en su seno se practicara la "polìtica partidaria", y esto lo hemos dicho muchas veces, no solamente lo hemos hecho por escrito, teorizando, sino que lo practicamos, lo que motivò que Fomentistas con distintas ideologìas polìticas, como: radicales, socialistas, comunistas, demòcratas, peronistas, etc.. cuyos dirigentes sentìan profundamente que esto no era "chàchara" y se sumaron a la FUSFA y juntos se lazaron a la lucha, para contribuir a paliar "la trilogìa mortal" de los elementos contaminantes del ambiente, del suelo y de las aguas.
No solo pròjimos hechos en el tema de la contaminaciòn; en pleno proceso, los fomentistas (los màs) estuvieron al frente del inolvidable
vecinazo del que participaron cerca de 8000 Avellanedenses.
Movimiento como "No pague el gas", que desembocò en la investigaciòn por los altos costos en el tendido de la red. El movimiento contra la 5ª cuota adicional del ABL, con la creaciòn de la Comisiòn de
seguimiento y fiscalizaciòn de los trabajos en el arroyo Sarandì.
Se participò del Plenario Provincial, organizado por COENFO, del que participaron 20 Federaciones, se logrò efectuar en Avellaneda en mayo 1986, la
Asamblea de COENFO, de la que participaron 28 delegaciones de distintos distritos, representantes de 43 Sociedades de Fomento Avellanedenses (en el Pato, con almuerzo de despedida, 288 fomentistas).
Se organizò el primer
Congreso Nacional de Entidades de Fomento, en nuestra ciudad, con delegados de las Confederacioens de Buenos Aires, Mendoza, Còrdoba, Santa Fe, Entre Rios, Corrientes, Chaco, La Pampa, San Juan y Tucumàn; y representantes de 35 Federaciones de la Provincia de Buenos Aires, representantes de 44 Sociedades de Fomento Avellanedenses.
Es elegido un miembro de FUSFA, para integrar el Consejo de UCEFURA, las delegaciones fueron agasajadas y despedidas en el gimnasio Bottaro del CAI (15.98.87). En diciembre 1987 el Comitè de Distinciones Internacionales de la Org. Mundial de las Naciones, le confiere a la FUSFA, la distinciòn denominada "
Flama mundial al mèrito" en caracter de Entidad relevante de la Comunidad de Avellaneda (continuarà...)